the gadsden purchase

the gadsden purchase

miércoles, 21 de mayo de 2014

¿Legalidad o favores políticos en desalojo de familias de Fraccionamiento Coronado?

Por:Sergio I.Franco Bernal y Maria Arauz
La procuraduría general de justicia del Estado en Sonora dio cumplimiento a una orden de desalojo en contra de 47 familias del Fraccionamiento Coronado de esta frontera. Cerca de doscientos agentes de la Policía Estatal, así como de la Policía Estatal Investigadora y con apoyo de la Policía Municipal de Agua Prieta, se dieron cita la madrugada de este 20 de Mayo para despojar a las familias que desde hace dos años y medio había invadido las viviendas de Fraccionamiento Coronado. El operativo se llevo a cabo a las 4:00 de la madrugada. Los agentes llegaron de sorpresa algunos encapuchados y portando Bate de Beisbol para su defensa, aun cuando las personas jamás se resistieron al desalojo. Los niños temían, pues fueron despertados durante la noche y se encontraban en un campo de concentración donde Policías del Estado y Municipales los rodeaban, cual delincuentes, en un fuerte operativo que sorprendió a todos los vecinos del sector de esta frontera. Por su parte los vecinos pedían a los ministerios públicos y secretarios de acuerdo les presentaran las órdenes de desalojo las cuales, nunca fueron presentadas. Hasta el momento se desconoce si en verdad los documentos que portaban eran en realidad órdenes de desalojo o simplemente papelería relacionada a las denuncias.
A pesar de que los medios estuvieron en el lugar de los hechos, los agentes estatales como ya es costumbre, se comportaron de una manera grosera y prepotente, como si ocultaran algo y dejaban entre dicho su labor. A no ver manera alguna de resolver el caso, las familias de manera pacífica entregaron las viviendas sin poner resistencia, llevando consigo, todas sus pertenencias así como las ventanas y puertas que ellos mismos pusieron. Según informan las familias, ellos jamás intentaron quedarse con las viviendas sin pagarlas, y que siempre buscaron la facilidad de comprar los inmuebles, pero la empresa constructora nunca les dio la cara. "Las viviendas se encontraban en un total abandono y deterioradas nosotros las reparamos. Entendemos que eso está mal pero igual son casas que eran para la venta y nosotros las queremos comprar, no queremos quedarnos con ellas" dijo otro de los vecinos.
"Siento que hay irregularidades en el proceso", comentó una de las mujeres: "Me llevaron a declarar al Ministerio Publico, pero la forma en que lo hicieron no fue la más adecuada. Yo iba saliendo de mi casa y en la esquina me paro un carro sin logos, se bajaron dos sujeto, me detuvieron, pero nunca se identificaron como Policías. Andaban sin uniformes y nunca se identificaron" recalcó. "Me llevaron a declarar a la calle 13, y después me soltaron pero la forma en que me trataron no fue conforme a derecho." Durante el desalojo era triste ver como niños salían de lo que hasta ese día fue su hogar, cargando con ellos monos de peluche y sus almohadas para subirse a los carros, donde sería su próxima vivienda mientras logran acomodarse en un lugar digno. Mientras los residentes sufrían la perdida de lo que consideraban su hogar agentes fuertemente armados vigilaban que todo marchara en paz. Mientras tanto, otros agentes se atragantaban comiendo en las cajas de las unidades policiacas, como si lo que hacían fuera un relajante día de campo. Para las 2:00 de la tarde las casas ya estaban en poder del Ministerio Público del Fuero Común, quien desde la madrugada llego al fraccionamiento Coronado y sorprendió a todos los invasores dejándolos en la calle sin un techo donde cubrirse. Pero la historia no termina ahí, pues algunos de los residentes de este fraccionamiento, quienes tienen estancia legal por medio de un contrato con la inmobiliaria, han dejado de pagar los pagos correspondientes desde hace ya varios meses. Según argumentan que la empresa incumplió lo establecido en los contratos, pues aseguran que las casas se están desmoronando, ya que la calidad de los materiales con que se construyo son de muy pobre. Los cables son muy corrientes y en algunos casos hay que cambiarse. Las estructuras de agua de drenaje son peores ya que se trasminan del segundo piso a la cocina, pues el grosor de los pisos es demasiado delgado. "Muy en ello quieren que les sigamos pagando la cantidad de un millón de pesos por las viviendas" recalcó uno de los propietarios legales. Estos vecinos que hoy no pagan sus viviendas por inconformidades, están en riesgo de perderlas de la misma manera que los invasores por incumplimiento de contrato. Los propietarios de la empresa que tienen un gran poder económico y político en las filas del PRI en la capital del Estado de Sonora, no se tentaran en corazón para despojar a quienes no les paguen sus deudas o quienes tenga un atraso en sus carteras vencidas. Es tan grande el poder político, que cabe mencionar que durante este operativo estuvo presente el Delegado de Zona Norte de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora, cosa que jamás en la historia de este municipio se había observado. Regordetes lobos feroces soplaron y soplaron con toda la fuerza de la Policía Estatal para despojar a esas pobres familias. Hoy 47 familias viven en la incertidumbre y desesperación de ver a sus hijos sin un techo.